https://eljardindelassreflexiones.blogspot.com/2020/05/prueba.html EL JARDIN DE LAS REFLEXIONES

jueves, 17 de abril de 2014

LA HORA DE DESPRENDER

Las mujeres y hombres maduros de ahora hemos llegado a una edad maravillosa en la que emprendemos el camino del des aprendizaje.
Fuimos criados con la creencia de que debíamos ser los mejores en todo: mejores estudiantes, mejores esposas, mejores esposos, mejores profesionales, mejores madres y padres, etc.
Fuimos educados con la creencia de que TODO es pecado.
Ha llegado la hora del des aprendizaje o lo que mi hija llama graciosamente, el importaculismo. (“Todo me importa un c…”).
Ha llegado la hora de decir NO en muchas ocasiones, de mandar al carajo los compromisos y las obligaciones. Pasó la hora de las responsabilidades desvelantes. Ahora nos gusta estar solos, disfrutar buenas conversaciones con gente que no nos insulta y que cree lo mismo que nosotros o que no le importa que opinemos diferente.
Es la hora de hablar de todo sin necesidad de sostenerlo como medio de defensa. Es hora de ver películas, de estar en una finca durante la semana, de leer, de escuchar, de sonreír y de burlarse de la mayoría de los mortales que viven pendientes de las pendejadas.
Nosotros ya demostramos que las responsabilidades fueron bien atendidas por nosotros, que hicimos las cosas lo mejor posible, que dejamos huellas, que somos buenas personas.
Lo que nos queda de vida es para nosotros, para disfrutar, para cumplir el mandamiento divino de amarnos a nosotros mismos. Por eso vamos a hacer lo que nos da la gana. Viajar al máximo, tomando café con amigas y amigos, conversando con todo el que nos encontremos.
Ya pasó la época de los roles. Lo que fuimos, fuimos; ahora somos para nosotros mismos sin tener que rendir cuentas a nadie. Los demás seguirán su camino de responsabilidades y de afanes, de preocupaciones y nerviosismos.
Nosotros ahora, estamos por encima del bien y del mal.
Vamos a museos, asistimos a conferencias y si no nos gusta nos salimos sin que nos importe, redescubrimos al Quijote y a Fernando González.  La vida es para nosotros una profunda experiencia interior, lejos de mitos, ritos, limosnas y pecados sin fin.
Es la hora de empezar a relajarnos y de conversar largas horas con uno mismo, que es el único que permanece siempre, ahora y después de que abandonemos la nave del cuerpo.
Nos rodean pocos seres a quienes amamos profundamente y que seguirán viviendo sus propias experiencias, estemos nosotros o no.
Mandaremos para donde sabemos a la gente que nos molesta, la tóxica.
Quienes nos buscan sin egoísmos van a encontrar una sonrisa, una mirada tierna y comprensiva, un consejo acertado o no, afecto.
Somos, ahora sí, libres de ataduras, de prejuicios, de creencias.
Somos libres si no le tememos ni a la vida ni a la muerte.
 
Samuel Arango

FLORES ROSADAS











FLORES MORADAS







EL MEJOR DE LOS REGALOS

¿Tienes problemas para escoger el regalo perfecto para alguien? Una amiga me transmitió alguna sugerencias:
* El Regalo de Escuchar: Sin interrumpir, sin planificar nuestra respuesta. Tan sólo escuchar.
* El Regalo del Afecto: Ser generoso con abrazos, besos y palmaditas en la espalda, siempre que sea de la forma apropiada.
* El Regalo de la Risa: Compartir historias y chistes. Tu regalo dirá: “Me encanta reírme contigo”.
* El Regalo de una Nota Escrita: Expresar nuestro aprecio o afecto por medio de una breve nota escrita a mano.
* El Regalo de un Cumplido: Decir con sinceridad, ” Hoy estás fantástico” o ” eres una persona especial”, puede despertar una sonrisa.

APARIENCIAS

Una mujer, con un vestido de algodón barato y su esposo, vestido con un humilde traje, se bajaron del tren en Boston, y caminaron tímidamente sin tener una cita a la oficina de la secretaria del Presidente de la Universidad de Harvard. La secretaria adivinó en un momento que esos venidos de los bosques, campesinos, no tenían nada que hacer en Harvard.
- ‘Desearíamos ver al presidente’ -dijo suavemente el hombre.
-’El está ocupado‘, contestó la secretaria. -
‘Esperaremos‘, replicó la mujer.
Por horas la secretaria los ignoró, esperando que la pareja finalmente se desanimara y se fuera. Ellos no lo hicieron, y la secretaria vio aumentar su frustración y finalmente decidió interrumpir al presidente, aunque era una tarea que ella siempre esquivaba.
-’Tal vez si usted conversa con ellos por unos minutos, se irán‘, dijo la secretaria al Presidente de la Univesrsidad.
El hizo una mueca de desagrado, y asintió. Alguien de su importancia obviamente no tenía el tiempo para ocuparse de gente con  vestidos y trajes baratos. Sin embargo,el presidente, con el ceño adusto pero con dignidad, se dirigió con paso arrogante hacia la pareja.
La mujer le dijo “Tuvimos un hijo que asistió a Harvard por sólo un año. Él amaba a Harvard. Era feliz aquí.  Pero hará un año, murió en un accidente. Mi esposo y yo deseamos levantar algo, en alguna parte del campus‘, que sea en memoria de nuestro hijo”.
El presidente no se interesó.
- ‘Señora’, dijo ásperamente, ‘no podemos poner una estatua para cada persona que asista a Harvard y fallezca. Si lo hiciéramos, este lugar parecería un cementerio.’
-’Oh no’, explicó la mujer rápidamente. -’No deseamos erigir una estatua. Pensamos que nos gustaría donar un edificio a Harvard’
El presidente entornó sus ojos. Echó una mirada al vestido y al traje barato de la pareja , y entonces exclamó:
-¡¡’Un edificio!! ¿Tienen alguna remota idea de cuánto cuesta un edificio? Hemos gastado más de siete millones y medio de dólares en los edificios aquí en Harvard!’
Por un momento la mujer quedó en silencio. El presidente estaba feliz. Tal vez se podría deshacer de ellos ahora.
La mujer se volvió a su esposo y dijo suavemente
-’¿Tan poco cuesta iniciar una universidad? ¿Por qué no iniciamos la nuestra?’
Su esposo asintió. El rostro del presidente se oscureció en confusión y desconcierto.
El Sr. Leland Stanford y su esposa se pararon y se fueron, viajando a Palo Alto, California, donde establecieron la universidad que lleva su nombre, la Universidad Stanford, en memoria de un hijo del que Harvard no se interesó. [La universidad ‘Leland Stanford Junior’ fue inaugurada en 1891, en Palo Alto. ’Junior’ porque era en honor al fallecido hijo del rico terrateniente.
Ése fue su ‘memorial’. Hoy en día la universidad de Stanford es la número uno del mundo, por arriba de Harvard.
Stanford

hermosos arreglos








miércoles, 2 de abril de 2014

AMOR VERDADERO

Un hombre de cierta edad vino a la clínica donde yo trabajo para hacerse curar una herida en la mano. Tenía bastante prisa, y mientras se curaba le pregunté qué era eso tan urgente que tenía que hacer.
Me dijo que tenía que ir a una residencia de ancianos para desayunar con su mujer que vivía allí . Me contó que llevaba algún tiempo en ese lugar y que tenía un Alzheimer muy avanzado.
Mientras acababa de vendar la herida, le pregunté si ella se alarmaría en caso de que él llegara tarde esa mañana.
-No, me dijo. Ella ya no sabe quién soy. Hace ya casi cinco años que no me reconoce.
Entonces le pregunté extrañado.
-Y si ya no sabe quién es usted,¿por qué esa necesidad de estar con ella todas las mañanas?
Me sonrió y dándome una palmadita en la mano me dijo: -”Ella no sabe quién soy yo, pero yo todavía sé muy bien quién es ella”.

Tuve que contenerme las lágrimas mientras salía y pensé: -”Esa es la clase de amor que quiero para mi vida. El verdadero amor no se reduce a lo físico ni a lo romántico. El verdadero amor es la aceptación de todo lo que el otro es, de lo que ha sido, de lo que será y de lo que ya no es… “