https://eljardindelassreflexiones.blogspot.com/2020/05/prueba.html EL JARDIN DE LAS REFLEXIONES

viernes, 21 de febrero de 2014

FARMACIA AMBULANTE

Somos las únicas criaturas en la superficie de la Tierra capaces de transformar nuestra biología mediante lo que pensamos y sentimos. Nuestras células están constantemente observando nuestros pensamientos y siendo modificadas por ellos. Un ataque de depresión puede arrasar nuestro sistema inmunológico; serenarse, al contrario, puede fortificarlo tremendamente.
La alegría y la actividad armoniosa nos mantienen saludables y prolongan la vida. El recuerdo de una situación negativa o triste, libera las mismas hormonas y sustancias biológicas destructivas que el estrés.

Sus células están constantemente procesando todas sus experiencias y metabolizandolas de acuerdo con sus puntos de vista personales. No se puede simplemente captar datos aislados y confirmarlos con un juzgamiento. Usted se transforma en la interpretación cuando la internaliza.

Quien está deprimido a causa de la pérdida de un empleo, por ejemplo, proyecta tristeza por todas partes del cuerpo. La producción de neurotransmisores a partir del cerebro se altera, el nivel de hormonas varía, el ciclo del sueño es interrumpido, los receptores neuropeptídicos en la superfície externa de las células de la piel se modifican, las plaquetas sanguíneas se tornan más viscosas y más propensas a formar grumos y hasta sus lágrimas contienen trazos químicos diferentes al de las lágrimas de alegría.

Todo este perfil bioquímico será drasticamente modificado cuando la persona encuentre una nueva situación. Estos hechos confirman la gran necesidad de usar nuestra consciencia para crear los cuerpos que realmente necesitamos. La ansiedad a causa de un examen acaba pasando, así como la depresión a causa de un empleo perdido.

El proceso de envejecimiento, sin embargo, tiene que ser neutralizado cada día. Shakespeare no estaba siendo metafórico cuando a través de su personaje Próspero dijo: “ Nosotros somos hechos de la misma materia que los sueños”.

¿Usted quiere saber como está su cuerpo hoy? Entonces recuerde lo que pensó y sintió ayer. ¿Quiere saber como estará su cuerpo mañana? ¡Observe sus pensamientos y emociones hoy! ¡O usted abre su corazón, o algún cirujano cardivascular lo hará por usted!

Otra perpectiva, desde un ángulo parecido lo pueden encontrar en Nelson Torres: “La Venganza del Inconsciente”.

ROSAS ROSAS








COMO TEMPLAR EL ACERO

Se cuenta la historia del herrero que, después de una juventud llena de excesos, decidió entregar su alma a Dios.
Durante muchos años trabajó con ahínco, practicó la caridad, pero, a pesar de toda su dedicación, nada perecía andar bien en su vida, muy por el contrario sus problemas y sus deudas se acumulaban día a día.
Una hermosa tarde, un amigo que lo visitaba, y que sentía compasión por su situación difícil, le comentó:
- “Realmente es muy extraño que justamente después de haber decidido volverte un hombre temeroso de Dios, tu vida haya comenzado a empeorar. No deseo debilitar tu fe, pero a pesar de tus creencias en el mundo espiritual, nada ha mejorado.”
El herrero no respondió enseguida, él ya había pensando en eso muchas veces, sin entender lo que acontecía con su vida, sin embargo, como no deseaba dejar al amigo sin respuesta, comenzó a hablar, y terminó por encontrar la explicación que buscaba. He aquí lo que dijo el herrero:
- “En este taller yo recibo el acero aún sin trabajar, y debo transformarlo en espadas. ¿Sabes tú cómo se hace esto? Primero, caliento la chapa de acero a un calor infernal, hasta que se pone al rojo vivo, enseguida, sin ninguna piedad, tomo el martillo más pesado y le aplico varios golpes, hasta que la pieza adquiere la forma deseada. Luego la sumerjo en un balde de agua fría, y el taller entero se llena con el ruido y el vapor, porque la pieza estalla y grita a causa del violento cambio de temperatura. Tengo que repetir este proceso hasta obtener la espada perfecta, una sola vez no es suficiente.”
El herrero hizo una larga pausa, y siguió:
- “A veces, el acero que llega a mis manos no logra soportar este tratamiento. El calor, los martillazos y el agua fría terminan por llenarlo de rajaduras. En ese momento, me doy cuenta de que jamás se transformará en una buena hoja de espada y entonces, simplemente lo dejo en la montaña de fierro viejo que ves a la entrada de mi herrería.”
Hizo otra pausa más, y el herrero terminó:
- “Sé que Dios me está colocando en el fuego de las aflicciones. Acepto los martillazos que la vida me da, y a veces me siento tan frío e insensible como el agua que hace sufrir al acero. Pero la única cosa que pienso es: Dios mío, no desistas, hasta que yo consiga tomar la forma que Tú esperas de mí. Inténtalo de la manera que te parezca mejor, por el tiempo que quieras, pero nunca me pongas en la montaña de fierro viejo de las almas.”

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ROSAS AMARILLAS









ROSA AZULES










SER FUERTE


Ser fuerte es amar a alguien en silencio.
Ser fuerte es irradiar felicidad cuando se es infeliz.
Ser fuerte es intentar perdonar a alguien que no merece perdón.

Ser fuerte es esperar cuando no se crea en el regreso.

Ser fuerte es mantenerse en calma en los momentos de desesperación.

Ser fuerte es demostrar alegría cuando no se siente.

Ser fuerte es sonreir cuando se desea llorar.

Ser fuerte es hacer a alguien feliz cuando se tiene el corazón en pedazos.

Ser fuerte es callar cuando lo ideal sería gritar a todos tu angustia.

Ser fuerte es consolar cuando se necesita de consuelo.

Ser fuerte es tener fe aunque no se crea.

Por eso, mismo durante la dura realidad y por más difícil que la vida pueda parecer: ¡Ama y sé Fuerte!


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ANGELES CALLEJEROS

Diane, una joven estudiante de la universidad, estaba en casa por el verano. Fue a visitar algunos amigos en la noche y por quedarse platicando se le hizo muy tarde, más de lo que había planeado y tuvo que caminar sola a su casa. No tenía miedo porque vivía en una ciudad pequeña y vivía sólo a unas cuantas cuadras del lugar.
Mientras caminaba a su casa, pidió a Dios que la mantuviera salvada de cualquier mal o peligro. Cuando llegó al callejón que le servía como atajo para llegar más pronto a su casa decidió tomarlo.Sin embargo cuando iba a la mitad, notó a un hombre parado al final del callejón y se veía como que estaba esperando por ella.
Diane se puso nerviosa y empezó a rezar a Dios por protección. Al instante un sentimiento de tranquilidad y seguridad la envolvió, sintió como si alguien estuviera caminando con ella; llegó al final del callejón y camino justo enfrente del hombre pero no pasó nada y llegó bien a su casa.
Al día siguiente, leyó en el periódico que una chica había sido violada en aquel mismo callejón unos 20 minutos después de que ella pasara por allí.
Sintiéndose muy mal por esa tragedia y pensando que pudo haberle pasado a ella, comenzó a llorar dando Gracias a Dios por haberla cuidado y le rogó que ayudara a la otra joven. Decidió ir a la estación de policía, pensó que podría reconocer al hombre y les dijo su historia.
El policía le preguntó si estaría dispuesta a identificar al hombre que vio la noche anterior en el callejón, ella accedió y sin dudar reconoció al hombre en cuestión. Cuando el hombre supo que había sido identificado, se rindió y confesó.
El policía agradeció a Diane por su valentía y le preguntó si había algo que pudieran hacer por ella y ella le pidió que le preguntaran al hombrepor qué no la atacó a ella cuando pasó por el mismo callejón.

Cuando el policía le preguntó al hombre el contestó: “Porque ella no estaba sola, había dos hombres altos caminando uno a cada lado de ella”